El número de procedimientos no quirúrgicos está creciendo exponencialmente en todo el mundo, motivado por la alta demanda, la tecnología sofisticada y avanzada, y la aceptación y normalización de los usuarios en las redes sociales que están dispuestos a compartir su experiencia con estos tratamientos abiertamente.
En efecto, entre tantos tratamientos nuevos para diferentes fines, es habitual mezclar algunos conceptos. Demasiadas indicaciones y aparatos, pero ¿cuál debe utilizar si busca tratamientos de rejuvenecimiento y combatir los primeros signos de la edad?
¿Qué utilizar para conseguir un aspecto juvenil?
Con el paso de los años, el Botox®, también conocido como, la toxina botulínica y el ácido hialurónico, son los dos más populares y grandes aliados para mantener nuestro rostro joven y terso.
Al principio, se podría pensar que ambos se utilizan para el mismo fin y que los resultados son idénticos. Sin embargo, esto es un mito de la belleza.
Sigue leyendo porque te explicaremos detenidamente las diferencias entre ellos, las ventajas y los inconvenientes, y cuál es el candidato ideal para ti.
¿Qué es el Botox®?
Botox® es el nombre comercial utilizado para referirse a la toxina botulínica. Esta inyección de toxina es un procedimiento muy eficaz que mejora las arrugas y las expresiones antiestéticas del envejecimiento o el cansancio.
¿Cómo funciona el Botox®?
El agente responsable de este popular tratamiento es una neurotoxina que bloquea la comunicación entre el nervio y el músculo, impidiendo así que éste se contraiga. Al relajar el músculo y reducir su contracción se evita la formación de la arruga.
En contra de la opinión popular, la toxina botulínica no puede hacer desaparecer las arrugas; en cambio, este procedimiento es ideal para prevenir las arrugas y los primeros signos de envejecimiento cuando no son muy perceptibles.
¿Qué son los rellenos dérmicos?
El nombre de rellenos dérmicos se refiere a las inyecciones de ácido hialurónico en su piel para añadir volumen, aumentar la hidratación y mejorar la textura general. El ácido hialurónico es una sustancia natural de nuestro cuerpo responsable de absorber el agua, retener la humedad, dar un efecto de volumen y crear una superficie suave para las arrugas y los primeros signos de envejecimiento.
Es muy habitual que cuando la gente piensa en rellenos de Ácido Hialurónico, tienda a pensar en los rellenos de labios, pómulos o barbilla que, en definitiva, se utilizan para realzar, afinar o añadir volumen en esas zonas.
Pero lo que probablemente no sabías es que los rellenos dérmicos, también conocidos como rellenos de ácido hialurónico para la piel, son realmente perfectos para deshacerse de las arrugas y las líneas de expresión.
¿Cómo funcionan los rellenos dérmicos?
Los primeros signos de envejecimiento aparecen cuando nuestro cuerpo empieza a perder su grasa natural, el colágeno y el ácido hialurónico que son los responsables de mantener un aspecto juvenil y una estructura que nos da una apariencia viva y saludable
Si estás en un momento de tu vida en el que sientes que ningún remedio natural puede funcionar para tu piel, o quieres resultados más rápidos, puede que quieras optar por algunos rellenos dérmicos de ácido hialurónico.
Al inyectar ácido hialurónico a través de una jeringa, el gel penetra en la piel, creando una superficie que rellena el pliegue o la línea, y como resultado, las líneas finas y las arrugas casi desaparecen, haciendo que su aspecto sea apenas perceptible.
Además de esta solución, se pueden utilizar como efecto de relleno y elevación añadiendo más volumen a la zona. Genefill ha creado la solución definitiva para deshacerse de las primeras arrugas y los signos de la edad a través de su línea vegana de rellenos bifásicos.
Sus dos productos Genefill Soft Touch y Genefill Soft Fill han sido especialmente diseñados para el tratamiento de la zona periorbital y perioral y de los pliegues superficiales. Gracias a su formulación reticulada, pueden ayudar a la piel a mejorar su contorno facial y a restaurar las estructuras anatómicas perdidas del rostro.
Vea cómo Genefill puede dar a su rostro un aspecto fresco, luminoso y saludable.
Rellenos dérmicos y Toxina Botulínica: Similitudes
- Pueden aplicarse tanto a hombres como a mujeres.
- La técnica utilizada en ambos es mediante pequeñas inyecciones en la piel.
- La duración es temporal, y ambos son reabsorbidos gradualmente por el cuerpo.
- Ambos tienen un efecto rejuvenecedor
Rellenos dérmicos y Toxina Botulínica: Diferencias
- Aunque la finalidad puede parecer similar, los rellenos dérmicos rellenan las arrugas para crear una superficie lisa, mientras que la toxina botulínica evita su aparición.
- La Toxina Botulínica se suele utilizar en el tercio superior de la cara y el ácido hialurónico en el tercio inferior por sus resultados y beneficios en ambos casos.
- La técnica de inyección es diferente, ya que la Toxina Botulínica se aplicaría en el músculo facial específico, y el ácido hialurónico en la arruga o marca a rellenar.
- La toxina botulínica se utiliza para corregir las arrugas dinámicas (formadas por la contracción), especialmente en el entrecejo, la frente y las patas de gallo, mientras que el relleno puede utilizarse para tratar tanto las arrugas dinámicas como las estáticas.
Si no está seguro de qué tratamiento es el mejor para usted, puede ponerse en contacto con nosotros y podremos resolver cualquier duda o recomendarle un profesional cerca de usted.